Civera Martínez, Marín

Marín Civera Martínez

 

Nació en Valencia el 15 de abril del año 1900. Trabajó en una empresa maderera en el Grao de Valencia y ampliaba su formación estudiando simultáneamente comercio y contabilidad, ejerciendo durante algún tiempo como profesor mercantil. En 1919 se afilió a la CNT y ese mismo año fue delegado del Sindicato Único de Empleados de Comercio en el Congreso confederal llamado de la Comedia, en Madrid, donde propuso la admisión de Sindicatos de Profesiones Liberales en la CNT como vía para encuadrar a profesionales de las clases medias que se identificaban con el anarcosindicalismo, moción que fue aceptada y que incrementó la solvencia de la Confederación.

Sin embargo, Marín Civera fue mucho más conocido como agitador cultural que como sindicalista. En 1930 empezaron a publicarse en la ciudad de Valencia una colección de Cuadernos de Cultura que detrás de llamativas portadas, diseñadas por Manuel Monleón y José Renau, editaban textos de los más destacados escritores sociales del momento, desde anarquistas como Ángel Pestaña o Isaac Puente a marxistas como Andrés Nin o Rodolfo Llopis, desde autores noveles como Carmen Conde o Juan Gil Albert a escritores consagrados como Gonzalo de Reparaz o Sebastián Faure. Hasta 1933 se publicaron o anunciaron casi un centenar de títulos sin otro objetivo que “hacer obra útil; despejar el tópico de nuestra incultura nacional y remover los espíritus ante la comprensión de los problemas vitales que agitan el mundo”.

La distribución de estos Cuadernos de Cultura iba paralela con la prestigiosa revista Estudios, que dirigía, también en Valencia, el médico anarquista Félix Martí Ibáñez y que tuvo una vida larga, pues se publicó desde 1923 hasta 1937. Pero en el año 1932 Marín Civera se decidió a publicar su propio mensual con la cabecera de Orto, una “revista de documentación social” tan plural como los Cuadernos.

Pero en 1933 la notoriedad de sus iniciativas culturales no se vio acompañada por la imprescindible rentabilidad económica, así que tuvo que buscarse un empleo bien remunerado para poder sobrevivir, lo que consiguió después de aprobar unas oposiciones para veedor o inspector del Instituto Nacional del Vino en Madrid. Ese mismo año, se consumó la ruptura de los llamados trentistas y la CNT; Marín Civera se adhirió al posibilismo libertario y en 1934 participó en la fundación del Partido Sindicalista, que lideraba Ángel Pestaña.

Cuando se inicia la Guerra Civil, es llamado a Valencia para que se haga cargo de la dirección de El Pueblo, el antiguo diario blasquista que se había convertido en portavoz del Partido Sindicalista de Valencia, y allí permaneció hasta que en 1937 se trasladó a Barcelona para ponerse al frente de Mañana, el órgano de prensa del Partido Sindicalista de Cataluña. En la capital catalana le sorprende la muerte de Ángel Pestaña y es elegido para sustituirle al frente de un partido que si antes de la guerra era minoritario, ahora parecía ser arrastrado por los acontecimientos.

Cuando cayó la Cataluña republicana, cruzó la frontera hispano-francesa y fue internado en el campo de concentración de Argèles-sur-mer, donde permaneció hasta que consiguió un visado que le permitió viajar a México. Se instaló en el Distrito Federal y trabajó en el mundo editorial, el que mejor conocía. Fue gerente de la Editorial UTEHA (Unión Tipográfica Editorial Hispano-Americana), fundada en 1937 por el emigrante español José María González Porto; en ella encontraron ocupación numerosos militantes del exilio libertario.

El Partido Sindicalista no pudo sobrevivir a la muerte de Ángel Pestaña y a la derrota de la Guerra Civil. No por eso renunció Marín Civera a proseguir la difusión de sus ideas, como se puso de manifiesto con la publicación por UTEHA en 1963 de su libro El marxismo. Origen y doctrina y por medio sus colaboraciones en distintas revistas del exilio (España Libre, Comunidad Ibérica, Espoir…), pero sí que se mantuvo al margen tanto de los proyectos como de los enfrentamientos del exilio libertario español.

Fue, además, miembro acreditado de la masonería, en la que ingresó en 1925 en la logia Patria Nueva de Valencia.

Falleció en la ciudad de México el 25 de mayo de 1975.

JPC